martes, 23 de julio de 2019

Algunas metodologías activas


En el siguiente enlace pudes descargar un documento en pdf sobre "Algunas metodologías activas" para que las conozcas mejor. Espero que te sea útil.



miércoles, 17 de julio de 2019

Eficacia de las intervenciones para el tratamiento de la dislexia: Una revisión.



Juan C. Ripoll Salceda, Orientador y Profesor de apoyo del Colegio Santa María la Real de Sarriguren  y  Gerardo Aguado Alonso, Orientador del Colegio Santa María la Real y Profesor asociado de la Universidad de Navarra realizaron esta investigación en 2014.
El informe fue encargado por el Colegio de Logopedas del País Vasco y la Asociación de Dislexia de Euzkadi y es propiedad de estas dos instituciones.

En este estudio se analizan diferentes métodos de tratamiento de la dislexia y las investigaciones sobre la eficacia de los mismos.

El estudio manifiesta que la intervención más eficaz y más respalda por la investigación científica es la intervención fonológica (aquellos en los que se combina el entrenamiento en habilidades fonológicas con el conocimiento de las letras y la práctica de la lectura).

A continuación se ofrecen las evidencias científicas de la misma:
- Varias de las síntesis de las mejores evidencias realizadas hasta la fecha coinciden en señalar que las intervenciones centradas en las habilidades fonológicas y en las correspondencias entre letras y sonidos resultan eficaces en la intervención en alumnado con dificultades de aprendizaje de la lectura (Slavin, Lake, Davis y Madden, 2009; Snowling y Hulme, 2011; What Works Clearinghouse, 2010).

- En cuanto a la forma de organizar las intervenciones, se ha destacado la eficacia de la tutorización individual (Slavin et al. 2009) y del trabajo en pequeños grupos, especialmente de tipo cooperativo (Promising Practices Network, 2003, 2013; Slavin et al. 2009; What Works Clearinghouse, 2012).

Además de estas síntesis, se han realizado varias revisiones sistemáticas con metaanálisis que ofrecen conclusiones favorables a las intervenciones educativas centradas en el refuerzo de habilidades lingüísticas, fonológicas y de descodificación.

Swanson, Hoskyn y Lee (1999): las intervenciones educativas producen efectos positivos de una magnitud considerable en el alumnado con dificultades de aprendizaje. Se considera que el afrontamiento más recomendable es una combinación de instrucción directa y enseñanza de estrategias con las siguientes características: práctica repetida de ejercicios, segmentación de la información en partes, control de la dificultad de las tareas, ayudas tecnológicas, modelado y trabajo en pequeños grupos interactivos. 

  Therrien (2004): la técnica de lecturas repetidas mejora la fluidez lectora del alumnado con dificultades de aprendizaje.

Scammacca, Vaughn, Roberts, Wanzek y Torgensen (2007): las intervenciones escolares de larga duración son eficaces para el alumnado con dificultades de lectura, especialmente cuando incluyen estos componentes: entrenamiento de las habilidades fonológicas y la descodificación, lectura guiada e independiente de textos de dificultad progresiva, ejercicios de escritura, práctica de estrategias de comprensión durante la lectura.

Scammacca, Roberts, Vaughn, Edmonds, Wexler, Reutebuch y Torgesen (2007): los adolescentes con dislexia se benefician de las intervenciones centradas en aprendizaje de vocabulario, lectura de palabras y estrategias de comprensión.

  Chard, Ketterlin-Geller, Baker, Doabler y Apichatabutra (2009): la técnica de lecturas repetidas para mejorar la lectura de alumnado con dislexia no está respaldada por investigación de calidad suficiente como para ser considerada una práctica basada en evidencias.

Goodwin y Ahn (2010): las intervenciones basadas en la morfología del lenguaje producen mejoras en la lectura, especialmente en el alumnado con dificultades de aprendizaje, de lectura o de habla.

  Tran, Sánchez, Arellano y Swanson (2011): la organización de la atención al alumnado con dificultades basada en modelos de respuesta a la intervención no consigue reducir las diferencias entre el alumnado que responde favorablemente a las intervenciones y el que no. Este trabajo ha sido criticado por problemas de método (Scammacca, Roberts y Stuebing, 2014).

Flynn, Zheng y Swanson (2012): las intervenciones para adolescentes con dificultades de lectura producen mejoras moderadas en la precisión lectora, pero se observa un ligero empeoramiento en la fluidez.

Ise, Engel y Schulte-Körne (2012): entre las intervenciones realizadas con alumnado alemán con dislexia, las que se centran en los síntomas específicos del problemas (práctica de la lectura y el deletreo) consiguen resultados significativamente mayores que los programas centrados en el procesamiento visual o auditivo o en la velocidad de procesamiento.

  McArthur et al. (2012): las intervenciones de tipo fonológico producen mejoras en la lectura de personas con muy baja competencia lectora.

  Galuschka, Ise, Krick y Schulte-Körne (2014): la enseñanza de habilidades fonológicas y de las relaciones entre letras y sonidos es la intervención más investigada y la única cuya eficacia ha sido confirmada estadísticamente.

A modo de conclusión, los autores establecen las siguientes implicaciones prácticas:

“1. Promocionar en los servicios de educación y salud las intervenciones de tipo fonológico que, por ahora, parecen ser las únicas cuya eficacia ha sido respaldada por un conjunto extenso de investigaciones. Potenciar la investigación y el desarrollo de los métodos fonológicos de intervención, de manera que el profesorado, los terapeutas y las familias del alumnado con dislexia o dificultades de aprendizaje de la lectura puedan disponer de recursos eficaces para paliar y tratar esos problemas y se tenga un mejor conocimiento sobre las estrategias de intervención más adecuadas para cada caso.

2. Evitar que se recomiende para el tratamiento de la dislexia cualquier método que no esté convenientemente respaldado por estudios rigurosos acerca de su eficacia. Incluso si este método se recomienda como parte de una intervención multidisciplinar se deberían aportar pruebas de que esa intervención multidisciplinar realmente produce mejoras mayores o más rápidas cuando se combina con ese método que cuando no lo hace. La eficacia de las intervenciones nuevas o poco estudiadas tendría que ser investigada,  procurando hacerlo con diseños lo más rigurosos que sea posible y advirtiendo a los participantes del carácter exploratorio o experimental de la intervención.

3. Evitar que los métodos de tratamiento de las dislexia no respaldados por evidencias se publicite, se subvencionen  con recursos públicos o se incluyan en los programas de formación de los profesionales que atienden a personas con dislexia,  salvo que se haga señalando explícitamente la falta de respaldo científico. No emplear palabras terapia o tratamiento (que sugieren que se trata de una intervención que producirá una cura o mejora de los síntomas de la dislexia) en métodos cuya eficacia no haya sido debidamente contrastada.

4. Crear una guía sobre intervención en dislexia que revise una por una todas las alternativas al tratamiento valorando las evidencias que sustentan a cada una de ellas y estableciendo recomendaciones. Esta guía tendría que ser la referencia para futuras propuesta y no se deberían considerar serias las recomendaciones basadas en evidencias de menor calidad que las aportadas en la guía.

miércoles, 3 de julio de 2019

Lista de las 20 mejores influencias en los logros (Hattie)


1
Expectativas del estudiante
1,44
2
Programas piagetianos
1,28
3
Respuesta a la intervención
1,07
4
Credibilidad del profesor
0,90
5
Proveer evaluación formativa
0,90
6
Microenseñanza
0,88
7
Debate en clase
0,82
8
Intervenciones completas con alumnos discapacitados

0,77
9
Claridad del profesor
0,75
10
Feedback
0,75
11
Enseñanza recíproca
0,74
12
Relaciones profesor-alumno
0,72
13
Práctica profesional vs. Práctica masiva
0,71
14
Estrategias metacognitivas
0,69
15
Aceleración
0,68
16
Comportamiento en el aula
0,68
17
Programas de vocabulario
0,67
18
Programas de lectura repetida
0,67
19
Programas creativos en los logros
0,65
20
Logros previos
0,65

lunes, 1 de julio de 2019

¿Qué es la Pedagogía basada en la evidencia?





El concepto de  “Pedagogía Basada en la Evidencia” surge de la “Medicina Basada en la Evidencia”, creado en 1992 a partir de un artículo publicado en la revista JAMA en Estados Unidos. El artículo trataba de un nuevo enfoque para la enseñanza de la Medicina. Este concepto cambió la manera de enseñar de muchas escuals médicas y llegó a otras ciencias y al campo de la Pedagogía.


La Pedagogía basada en la evidencia lo que busca es fundamentar  las metodologías educativas en los resultados de las investigaciones.


Este vídeo es de Marta Ferrero, Doctora en Psicología, explicando qué es la Pedagogía Basada en la Evidencia. En esta conferencia descarta algunos mitos en la enseñanza y recomienda utilizar los que nos aporta la investigación educativa. Dura 38 minutos, pero vale la pena verlo.