Se ha ido estudiando la relación existente entre el
ejercicio físico, la cognición y el renrimiento académico. Algunos estudios
señalan esta correlación positiva:
- La actividad física puede influir en diversos ámbitos como el
fisiológico, el psicológico y el social, lo que puede facilitar una mejora
en los resultados académicos (Howie & Pate, 2012).
- Los jóvenes que participan que mejoran sus habilidades
motrices y su condición física general, aumentan su autoestima y su
capacidad de autocontrol (Mahar et al. 2006).
- Un metaanálisis de Sibley & Etnier, (2003), probó que en
44 estudios se evidenciaban una correlación positiva entre actividad
física y cognición en niños y adolescentes.
- Nelson y Gordon-Larsen (2006) llevaron a cabo un estudio con
11.957 adolescentes de diversas partes de Estados Unidos. Observaron
que los adolescentes que participaban en actividades deportivas
presentaban mayor probabilidad de obtener calificaciones altas en Matemáticas y
Lengua encomparación con sus compañerosque no hacían deporte.
-En un estudio de Shen (2017) con 184 alumnas de
Secundaria, se encontró que la participación en actividades físicas
vigorosas es un predictor del rendimiento académico.
Si quieres tener más información puedes consultar el artículo
completo en el enlace del Blog de la Evidencia en la Escuela: